Mensaje a todos los Misioneros Redentoristas de América Latina y El Caribe

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MENSAJE A TODOS LOS MISIONEROS REDENTORISTAS DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

 

“Para que todos sean uno, a fin de que el mundo crea que tú me enviaste”. (Jn 17,21)

(Atyrá, Paraguay, 12 de Mayo 2016)

¡Saludos a los cohermanos de América Latina y el Caribe!

  1. Nosotros, misioneros redentoristas de América Latina y el Caribe, laicos(as), hermanos y padres -69 en total- reunidos en Atyrá, Paraguay, experimentamos fuertemente la belleza y la alegría de vivir la fraternidad del Evangelio durante dos semanas. Meditamos sobre varios temas que nos ofrecieron nuevas pistas de reflexión y nuevos desafíos.
  2. Entre las alegrías que experimentamos queremos resaltar: la presencia alegre, sencilla e inspiradora de nuestro animador general, P. Michael Brehl, siempre el primero en animarnos a dar pasos más audaces. Tuvimos el privilegio de hacer dos peregrinaciones. Pudimos celebrar nuestra fe y fraternidad en el Santuario de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Asunción y también en el Santuario Nacional de la Virgen de Caacupé, patrona de Paraguay. María nos acompañó muy de cerca en estos días, en nuestras celebraciones y en la convivencia.
  3. Queremos resaltar sólo algunos de los temas que nos desafiaron en nuestras oraciones, reflexiones y en los diálogos: Somos conscientes de que todavía tenemos que avanzar mucho en nuestro proceso de reestructuración. Esa importante propuesta apunta a una mayor agilidad pastoral y a un compromiso más exigente en la misión. A pesar de haber ampliado nuestras fronteras con misiones en Surinam, Uruguay y Cuba, todavía sentimos la necesidad de ir más allá, buscando siempre nuevas iniciativas misioneras.
  4. Estamos contentos porque hemos comprobado una vez más el enorme aporte de los laicos(as) en la vivencia de nuestra espiritualidad y de la misión compartida. Este fue un tema sobre el cual hablamos mucho y los laicos que participaron nos ayudaron a profundizar más en esta área.
  5. La formación de nuevos misioneros redentoristas fue otro tema tratado con cariño y profundidad. Formar redentoristas para el tiempo actual y para los desafíos de la reestructuración supone mucho empeño y coraje para formadores y formandos. Por eso contamos con su apertura y participación en este nuevo proceso que la Congregación está viviendo.
  6. También nos acompañaron las angustias y preocupaciones de muchos cohermanos de nuestro continente que se sienten desafiados por problemas serios y dolorosos. Nos referimos a la situación política y social en Brasil, Venezuela, Haití, Cuba y Ecuador. Sus relatos despertaron en nosotros una solidaridad siempre mayor.
  7. Como parte de nuestra reunión también empezamos el proceso de discernimiento para elegir al nuevo Superior General y su Consejo. Ese proceso requiere mucha apertura a la voluntad de Dios, a los signos de los tiempos y a la voz del Espíritu Santo. Esperamos que los nuevos rumbos que serán definidos en la fase canónica del XXV Capítulo General reafirmen y fortalezcan el profetismo del carisma redentorista. Esto exige que todos los misioneros redentoristas estemos abiertos a la conversión. La renovación de nuestra misión es un verdadero llamado a la conversión. El ejemplo y las enseñanzas del Papa Francisco nos ayudarán en este proceso.
  8. A la Provincia de Paraguay manifestamos nuestra gratitud por la acogida y organización del encuentro. En Marianela encontramos todas las condiciones para que nuestra reunión se desarrollara sin contratiempos.
  9. A los cohermanos, laicos (as) y amigos (as) que estuvieron unidos a nosotros en la oración les enviamos nuestro sincero agradecimiento.
  10. Pensamos que estamos preparados para mostrar nuestro rostro latinoamericano y caribeño y nuestro compromiso misionero a los miembros de la fase canónica del Capítulo General. Buscamos responder con espíritu evangélico, con fidelidad y dedicación, a las voces y clamores de nuestro pueblo, especialmente a los más pobres y abandonados. Será importante que asumamos las muchas sugerencias presentadas y que podamos implementarlas en nuestras Unidades como fruto de nuestro encuentro.

En la alegría y esperanza,

Misioneros Redentoristas de América Latina y el Caribe presentes en la primera fase del XXV Capítulo General.

(enviado por Manuel Rodríguez, C.Ss.R., Coordinador A.L. y Caribe)

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