El Capítulo Provincial de Viena-Múnich se reunió en Gars am Inn, Alemania, los días 28 y 29 de abril. Once miembros del Capítulo asistieron a la reunión.
Es costumbre que el Capítulo Provincial de la Provincia de Viena-Múnich se reúna para su sesión anual durante la segunda semana después de Pascua. Este año, la sesión estaba prevista originalmente para el lunes y miércoles (del 28 al 30 de abril). Sin embargo, gracias al intenso trabajo realizado, el Capítulo logró concluir ya el martes por la noche. La sesión se realizó en la comunidad de Gars, ofreciendo amplias oportunidades de encuentro con los hermanos de la comunidad más grande de la Provincia.
El Capítulo de este año puede considerarse también un “Capítulo Jubilar”, ya que hace exactamente diez años que las Provincias de Viena y Munich – entonces unidas en una federación – formaron oficialmente una única Provincia. En su informe a los capitulares, el Provincial subrayó este logro, afirmando que fue una elección sabia. Señaló también que la experiencia demuestra que se necesitan unos diez años para que una provincia pase de ser una simple estructura común a convertirse en una verdadera comunidad.
El camino hacia el futuro debe recorrerse una y otra vez. No permite paradas y, mucho menos, retornos. Dado que nuestra Congregación se encuentra actualmente en un proceso de reestructuración a nivel global, uno de los temas centrales abordados por el Capítulo fue una vez más el de la posible fusión con otras provincias. Los miembros del Capítulo examinaron y aprobaron por unanimidad la versión final del Acuerdo de Federación entre las Provincias de Dublín, Londres, San Clemente y Viena-Múnich. Además, el padre Anton Wölfl fue elegido miembro del Consejo de la Federación. Junto con el Provincial, representará a la Provincia en este nivel.
Las demás resoluciones del Capítulo también se orientaron hacia el futuro, abordando, entre otras cosas, cuestiones económicas. Los miembros también se ocuparon de la vida comunitaria y de las actividades pastorales y misioneras. El Padre Provincial recordó también al Papa Francisco y su valiente deseo de renovación. Destacó cuatro principios que el Papa formuló en su primera gran exhortación, Evangelii Gaudium, en noviembre de 2013: el tiempo es mayor que el espacio, la unidad prevalece sobre el conflicto, la realidad es más importante que la idea y el todo es mayor que la parte. Estos principios, concluyó el Provincial, deben implementarse también dentro de la Provincia.
P. Martín Leitgoeb
