En el Domingo de la Trinidad, 15 de junio de 2025, tuvo lugar en la Iglesia de San Alfonso de Roma una celebración profundamente significativa y alegre: el 40º aniversario de la comunidad filipina. Este hito reunió a un número considerable de filipinos en una sentida expresión de gratitud, unidad y orgullo cultural, reconociendo cuatro décadas de culto, servicio y comunión.
Una Celebración Arraigada en la Devoción
La celebración comenzó a las 15:00 h con la Novena a la Madre del Perpetuo Socorro, una devoción profundamente sentida por los católicos filipinos. A las 15:30 h, tuvo lugar la Santa Misa, presidida por Su Eminencia el Cardenal Luis Antonio Tagle, Obispo de Albano. La Misa fue concelebrada por más de 30 sacerdotes, muchos de los cuales han servido a los fieles filipinos a lo largo de los años, lo que marcó la ocasión con un profundo significado espiritual.
Antes de concluir la Misa, el P. Lhionel Namara, CSsR, responsable de la comunidad filipina, expresó su más sincero agradecimiento a Su Eminencia el Cardenal Luis Antonio Tagle y a todos los que contribuyeron al éxito de la celebración del 40º aniversario. Reconoció el incansable esfuerzo de los comités organizadores, los voluntarios, los miembros del coro y toda la comunidad filipina, cuya dedicación hizo del día algo verdaderamente memorable.
Posteriormente, el P. Roni dos Reis, CSsR., Prefecto de la Iglesia, también expresó su profundo agradecimiento al Cardenal Tagle por su inestimable presencia y su inquebrantable apoyo. Como muestra de aprecio y reverencia, le entregó un hermoso Icono de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, símbolo de la profunda devoción de la comunidad y su misión compartida de difundir esperanza y compasión. El gesto fue recibido con un cálido aplauso, testimonio del profundo amor y respeto de la comunidad por el Cardenal, quien desde hace mucho tiempo ha sido una inspiración para los filipinos en Roma y en todo el mundo.
Tras la celebración eucarística, la comunidad se reunió para la bendición del Muro del Recuerdo en el Salón Filipino. Este muro, recientemente inaugurado, presenta 40 fotografías seleccionadas, cada una de las cuales representa momentos clave e hitos en la vibrante historia de la comunidad, desde sus humildes comienzos hasta sus grandes celebraciones, desde las visitas pastorales hasta los momentos de crecimiento personal y colectivo.
Felicitaciones de la Juventud
El grupo juvenil filipino lideró la organización de un programa de felicitaciones, aportando color, creatividad y un profundo sentido de respeto a la celebración del aniversario. Entre los momentos más destacados del programa se encuentran la presentación del logotipo oficial del aniversario, que simboliza la trayectoria y las aspiraciones de la comunidad, así como mensajes en video y saludos de figuras clave como el Cardenal Tagle, los Superiores Provinciales de las Provincias Redentoristas de Manila y Cebú, y otros que han acompañado a la comunidad a lo largo de los años.
Una breve mirada al pasado: Los inicios de la comunidad filipina
Los orígenes de la comunidad filipina en Sant’Alfonso se remontan a 1985, cuando el P. Luis “Louie” Hechanova, CSsR, entonces Consultor General, observó a un grupo de filipinos que se reunían regularmente en la estación Termini todos los domingos.
Curioso, se acercó a ellos y les preguntó por qué estaban allí. Su respuesta fue simple y sorprendente: “No tenemos dónde quedarnos los domingos cuando no trabajamos”.
Conmovido por su difícil situación e inspirado por la misión redentorista de servir a los abandonados y pobres, el P. Louie pensó en abrirles la iglesia. Comentó el asunto al difunto P. General Juan Manuel Lasso de la Vega, quien apoyó incondicionalmente la idea. Inicialmente, se ofreció a la comunidad el Aula Magna y, más tarde, la Sala Filippini, que se convirtió en el centro de sus reuniones.
Desde esos modestos comienzos, la Comunidad Filipina se ha convertido en una vibrante familia espiritual, activa en la vida parroquial, los eventos culturales y la labor misionera, firmemente arraigada en la fe y el servicio.
Al celebrar su 40º aniversario, la comunidad no solo honró su rico pasado, sino que también miró hacia el futuro con un compromiso renovado. Con el continuo apoyo de los Padres Redentoristas y de la Iglesia Católica Romana en general, los fieles filipinos en Roma reafirman su identidad como misioneros de la misericordia, la alegría y la fe, fieles a su herencia y devoción a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.
Este 40º aniversario no es solo un hito histórico; es una celebración de la vida, la resiliencia y la fortaleza perdurable de la comunidad unida en Cristo. La celebración concluyó con una comida festiva que enriqueció la confraternidad entre los miembros de la comunidad.
Padre Sanjay Tirkey, CSsR, Scala News